Durante el año 2020 se han reciclado 76.170 kg de envases ligeros en el contenedor amarillo, lo que supone un incremento de más del 10 % con respecto al año 2019 que se recogieron 68.740 kg.
Con el fin de mejorar el reciclaje en nuestro municipio, a continuación, se facilita información sobre lo que se puede depositar en el contenedor amarillo.
¿Qué tirar en el contenedor amarillo?
Dentro del contenedor amarillo, debemos depositar: botellas y envases de plástico, envases metálicos y briks como:
- Botellas de plástico
- Latas
- Tapas y tapones de plástico, metal y chapas
- Bandejas de aluminio
- Papel film de plástico y papel de aluminio
- Aerosoles
- Botes de desodorante
- Bolsas de plástico (excepto las bolsas de basura)
- Tarrinas y tapas de yogurt
- Briks: de leche, zumos, sopas, etc.
- Bandejas de corcho blanco
- Tubo de pasta de dientes
Errores más comunes del contenedor amarillo:
Es lógico pensar que todos los objetos que estén fabricados con plástico y que ya no nos son de utilidad, van al contenedor amarillo, pero no siempre es así. En el contenedor amarillo debe depositarse exclusivamente lo citado anteriormente.
No deben depositarse:
- Juguetes de plástico,
- Biberones y chupetes,
- Utensilios de cocina
- Cubos de plástico.
Otros materiales con los que también podemos dudar, y que por tanto no deben depositarse en el contenedor amarillo, son los siguientes: vasos de papel de cafeterías, papel plastificado usado en carnicerías y pescaderías, tupperwares, cápsulas de aluminio de café, moldes de silicona para cocinar, termos, macetas de plástico, cajas de CD’s y DVD’s, carcasas de vídeos de VHS y cintas de casete, monederos y carteras, bolígrafos, sacapuntas, mecheros, materiales de plástico de cuadros o fotografías, envases de los medicamentos o neceseres.